La luz al final del túnel

¡¡POR FIN HA APARECIDO!!
¿Habéis oído hablar alguna vez de "la luz al final del túnel"?. Por lo visto es la esperanza que nunca se apaga y... parece ser cierto.
Lo prometo: si por fin hemos llegado al final del túnel, escribiré todo lo que ha pasado en cuanto pueda.
Bicos
Judita

Hoy no...

Hoy no es mi día, bueno, en realidad no es mi semana... tampoco es mi mes y, ahora que me doy cuenta, no es mi año. Dios, ¿cuánto dura un lustro? 5 años ¿verdad?, pues tampoco es mi lustro y decididamente no es mi siglo...
¡QUIERO QUE ESTO CAMBIE YA!.
Para Simper: soy afortunada en muchas cosas, pero mi miedo es perderlo todo. Ahí es donde saben atacar.
Bicos.
Judita

Simper al aparato!

ALOHA…aquí Simper…despues de las reiteradas amenazas de la sin par Judita me he decidido a escribir (que remedio). Tengo varias excusas por no haber escrito antes. La primera es que no tengo tiempo. Muy típica (lo sé) y poco creibe para Judita que sabe que estoy en ese maravilloso y oscuro mundo del paro. La segunda es que tengo pocas cosas que contar: mi vida se limita a comer y estudiar, y no quiero ser de eso tipo de madre pesada que se pasa el dia contando lo rico que es su bebé. La tercera, y la unica verdadera, es que creo que Judita se desenvuelve muy bien y está llevando el blog de “perlitas”.Ay, ya te imagino Judita pensando ¡que morro tienes simper!.Mientras escribo escucho a Sabina. Por cierto, el concierto mejor que bien!Que tío! Que voz! Que arte! Creo, y Santi está de testigo, que mi hermana y yo dimos “la nota” pero es lo que hay. Si cantasemos bien no estaríamos entre el público sino ahí arriba, haciendo babear a la gente como él hizo. Que tío! Que voz! Que arte!.1.000 personas con los 5, 10 y hasta 15 sentidos puestos en sus movimientos, en sus palabras, en sus pintas (que las llevaba), creo que como yo nadie queria perderse nada, y a todos nos gustaría, como buenos sabinistas, que la vida fuera siempre así, alli oyendole hablar, cantar, moverse…Que tío! Que voz! Que arte! Y cuanta razon en cada canción, en cada monólogo, en cada puesta en escena…Ay Panchito Varona, ay Olgita…que suerte que teneis.Que tío! Que voz! Que arte! Solo comparable a las artes de la Judita, que ahí sigue, donde otros desertamos, manteniendo el rumbo cuando otros viramos a toda vela, sonriendo mientras a otros se nos ahogan los ojos…Que tia! Que tía! Que tía!

APRENDIENDO A JUGAR AL TENIS

Veo el anuncio del Cola-Cao y me muero de envidia.
¿Por qué?, porque después de llevar dos domingos "aprendiendo" a jugar al tenis con mi super-profesor particular, me hubiera gustado nacer con una raqueta en las manos, como Nadal, "que ya nació jugando" (mother dixit).
Creo que tengo agujetas en músculos que no existían cuando estudié el cuerpo humano en 7º de E.G.B. (ahora creo que es 1º de la E.S.O. para los noveles). ¡Aaaayyyy!, me duele hasta el alma.
Pero hay una cosa que me ha sorprendido, que he conseguido darle a la pelota más de lo que nunca me hubiera imaginado, sí, pero creo que es porque mi profesor particular (que me tienen un poco enchufada) me las tira fáciles, y es que lo tengo en el bote (al profesor, no a las pelotas).
Y todo esto para intentar ganar el partido de tenis que mi compañera Simper (esa que ya no escribe y la odiamos por eso entre otras cosas) apostó una cena que ganaríamos, y todo teniendo en cuenta que nunca jamás, en la vida, toqué una raqueta de tenis.
Os contaré la próxima clase.
Bicos
Judita